MBUX son las siglas de “Mercedes Benz Users Experience”, el sistema de inteligencia artificial de la marca alemana.
No solamente es la pantalla más grande que hayamos visto, ya que ocupa toda la consola de mandos, es decir, más de 1,30 metros, sino que ademas convierte al Mercedes EQS en la referencia mundial en cuanto a pantallas de infoentrenimiento.
Cabe destacar que el visualizador OLED de 12,3 pulgadas de diagonal frente al asiento del acompañante pone a disposición de su ocupante un área propia de visualización y de manejo.
Si el asiento del copiloto no está ocupado, la pantalla queda bloqueada con el fin de no distraer al conductor. Por otro lado, si el acompañante está viendo una película, por ejemplo, con el fin de evitar que el conductor se distraiga, un sistema de rastreo de los ojos supervisa que no gire la cabeza, y si lo hace frecuentemente, se apaga automáticamente.
Después probar esa enorme pantalla, todo lo demás no importa.
Cuando nos acercamos al EQS para manejarlo, las manijas de las puertas salen automáticamente y al acercarte aún más, la puerta del conductor se abre también de forma automática.
Antes de iniciar la marcha revisamos y probamos los comandos unos minutos, todo nos parece asombroso y eso que últimamente hemos manejado coches modernos que nos sorprendieron pero el Mercedes EQS los supera a todos.
La versión 580 4Matic, que probamos, es la más potente hasta que llegue la variante AMG , con 385 kW de potencia, 516 caballos de fuerza y 631 libras pie de torque.
Desarrolla una velocidad máxima de 130 millas por hora, acelera de 0 a 60 millas en 4.1 segundos
Tenemos cuatro modos de conducción que varían los parámetros y el rendimiento del coche: Eco, Normal, Sport e Individual.
Otro detalle que se destaca en el Mercedes EQS es el head-up display con realidad aumentada en la pantalla central. No solo aparece toda la información necesaria, sino que, además, se muestran imágenes en tiempo real, por ejemplo, se muestra una imagen real del coche que nos precede y la señal de dónde girar..
En la pantalla central se muestra imagen real del coche que nos precede y la señal de dónde girar.
Para resaltar, el Mercedes EQS es una cápsula de aislamiento, una burbuja rodante. Una sensación parecida a la que se experimenta al conducir un Clase S y su Magic Body Control y la suspensión Airmatic, pero con el añadido del motor eléctrico, sin ruidos mecánicos.
Las sensaciones a bordo se refuerzan con detalles como los asientos, muy grandes, con múltiples regulaciones, climatización (refrigeración y calefacción) y funciones de masaje personalizables. La oferta se repite también en las plazas traseras, que aparte de ofrecer un espacio sorprendente para estirar las piernas, se pueden reclinar para adoptar una posición de descanso.
La atmósfera de la cabina se puede elegir a voluntad, tipo y color de la iluminación, fragancia del ambientador, estilo de climatización, recreando incluso algunos ambientes de la naturaleza.
Hay tres programas, denominados “Claro de bosque”, “Romper de olas” y “Lluvia estival”, que configuran el interior para ofrecer sensaciones similares a las que se experimentan al aire libre: en el último, por ejemplo, las luces pasan a tonos azulados, el climatizador envía un aire más húmedo y la acústica interior modifica el sonido que llega del exterior para que recuerde al de una llovizna.
Cuando el sistema nota algo de cansancio en el conductor, se activa de forma automática el programa Energizing Nature, que a la vez que pone una música instrumental más energizante, junto con un masaje automático del asiento.
El Mercedes-Benz EQS es el primer modelo de la marca desarrollado sobre una plataforma exclusiva de vehículos eléctricos. Una base que le ha permitido a los ingenieros y diseñadores tener total libertad para darle forma.
En lo que a la estética externa se refiere, el EQS ofrece un concepto clásico, sencillo y desprovisto de estridencias.
En lo que a elementos estéticos, para destacar, la parrilla carenada con un tramado plasmado con pequeñas estrellas sin el aro, parecido al primer logo de la marca, el de 1911, un pilar A adelantado que reduce el voladizo delantero y aumenta la amplitud interna o un estilo de luces traseras conectada por una tira de LED que le da un rasgo distintivo.
Ni que decir tiene que en el apartado de la iluminación este EQS cuenta con lo más avanzado de la marca, como son las luces Digital Light con 2,6 millones de píxeles.
En resumidas cuentas, el Mercedes EQS esta cargado de tecnología y su MBUX Hyperscreen supone, un cambio de paradigma sobre lo conocido hasta ahora.
Especial para Garage TV / LUIS FERNANDEZ
